RG
lunes, 25 de agosto de 2014
un agosto con mucho amor
21/08/2014
Te vas de mi casa, y mi cama te llama.
Te vas de mi vista, y mi alma te sueña.
Te vas de mi abrazo, y mis dedos te
buscan.
Te vas de mis labios, y mis besos te
ruegan.
Volvés a mi mundo, y me conquistás.
Volvés a mi piel, y tiemblo.
Volvés a mi día, y mis manos
festejan.
Volvés a mi alcance, y el resto se
apaga.
Me hacés
pensarte-soñarte-extrañarte...
25/08/14
No dejaré que sufras frío, aunque sea
con mi cuerpo;
te abrigaré.
No vas a temblar congelada, sino de
placer;
extasiada.
Vas a empezar a sentir calor, y a
sentirte cómoda,
a punto tal que la calma te llega a
absorber,
y no querrás salir de la cama.
También te voy a hacer reír después
de estar enojada,
porque no valdría la pena perder el
tiempo;
no hay nada más verdadero que ésto.
No dejaré que te hundas en la
tristeza,
sea como fuere, te sacaré.
No vas a llorar acongojada, sino de
emoción;
o de risa.
Vas a empezar a sentir amor, y a sentirte contenta,
hasta que con intensidad te lo
confirme,
y entonces; no querrás salir de la
cama.
También voy a mostrarte devoción
genuina,
porque no hay razón por la cual
disimular;
no hay nada más puro que ésto.
RG.
martes, 19 de agosto de 2014
ella y las otras palabras
No lo comparte porque es exhibicionista. Ni lo publica buscando fama. No tiene delirios de grandeza ni una pizca de soberbia. Tampoco es que no tiene vergüenza; de hecho tiene de más. Ella escribe porque le gusta leer y sentirse atrapada, aunque sea un momento, en la idea del autor. De un extraño, un ajeno.
Desde muy chica admiró ese don que tenían los escritores para transportarla a otros mundos, a diferentes situaciones; a otras vidas. Le pareció casi mágico el hecho de que sólo con su creatividad - y talento - puedan conectarse tan directamente con imaginación del lector. Sea quien fuere, en dónde sea que esté, hable en el idioma en el que hable, viva como viva, etc. Mágico.
Podían crear películas en su mente; hacerla pensar, reflexionar, y dudar. Hasta podían levantarle el ánimo con tan sólo una frase, o hacerla emocionar hasta llorar por una historia inventada. Podían enseñarle cosas. Podían ayudar, incentivar, promover...
Empezó por enamorarse de cada una de las letras del abecedario; las practicó como si fueran pequeñas obras de arte. Escribió primero lo que le dictaban en el colegio, y logró que sus escritos sean hermosos a simple vista; pero sin profundidad. Afortunadamente, pronto su interés se volcó a las palabras. Por su significado, su tono particular, y por lo que producían al ser recibidas.
Fue después de ésta etapa de aprendizaje que, en cuarto grado, le presentaron las leyendas y los textos de la mitología griega. Eran fascinantes las historias, realmente interesantes. Con acción, fantasía, monstruos y héroes. Y todo se hacía muy real en su mente luego de leerlo. Entendió lo que eran las metáforas; y se terminó de enamorar de la palabra escrita.
En esos tiempos, a sus diez años, nació su sueño de ser escritora. Lo importante ahora era descubrir el mensaje que quería transmitir. Saber la emoción, la historia adecuada para sostenerlo firme, y la metáfora ideal para transportarlo.
Eso busca desde ese entonces. Y hasta que lo encuentre, seguirá practicando, y enviando mensajes dispersos a las almas de quienes los quieran recibir.
RG
hay días y momentos
Hay días más difíciles que otros.
En los que se piensa más,
y se siente fuerte.
Esos días que susurran fracasos.
Que hacen eco los pecados,
y silencian las risas.
Hay algunos momentos oscuros.
De completa melancolía,
por el pasado que arde.
Esos que nos llenan de angustia.
De dolores resucitados,
por lágrimas estancadas.
Pero todo en la vida es un contraste;
afortunadamente hay más días,
y más momentos...
De esos que nos enseñan,
sobre los otros y su naturaleza.
De esos que te hacen apreciar,
y saber con total seguridad:
Que todo eso pasa;
eso y mucho más.
Que así es la vida;
y que nunca cambiará.
Que hay que seguir caminando,
y siempre levantarse al caer.
Que al final todo depende de uno...
Y aún queda mucho que aprender.
RG
cualquiera puede amarte pero ninguno como yo
Cualquiera puede regalarte la luna, las estrellas, y algún que otro atardecer.
Cualquiera puede decirte lo que querés escuchar;
que estarán siempre a tu lado, pase lo que pase,
en las buenas y en las malas. Con todo y nada que perder.
Pero, lamentablemente, no cualquiera puede cumplirlo.
Pueden regalarte flores y chocolates, o sorprenderte con tu alfajor preferido.
Pueden prepararte el desayuno mientras dormís, con todo y pomelo;
y hasta jugo de naranja exprimido.
Pueden cebarte unos ricos mates mientras manejás;
y preparar la comida para cuando llegás tarde y cansada.
También pueden hacerte reír cuando te frustrás; y besarte de pasada.
Pueden complacerte de mil maneras diferentes, física y emocionalmente;
también ser protagonistas omnipotentes en tus sueños de utopías.
Pueden editarse hasta ser quienes vos necesitás, y regalarse eternamente;
lo más cercano conocido a la Realeza de las fantasías.
Cualquiera puede contenerte cuando te sentís mal,
y darte un abrazo cuando se nota que lo necesitás.
Cualquiera puede dedicarte todas las canciones de amor que escuche,
ser extra romántico y enviarte, o recitarte, poemas que relaten lo que se siente estar con vos.
Pero no cualquiera puede inventarlos. Con nada más que tinta, papel, y tu recuerdo:
NO SERÉ PERFECTA PERO SÍ REAL;
SOY MUY ATENTA, Y TAMBIÉN LEAL.
SÓLO QUIERO COMPARTIRTE MI AMOR;
Y PROTEGERTE POR SIEMPRE DEL DOLOR.
YO TE PIDO CARIÑO Y HONESTIDAD;
COMPAÑERISMO CON PIZCAS DE AMISTAD.
REPITO:
NO SERÉ PERFECTA
PERO MI AMOR ES ÚNICO
TE LO DIGO EN PRIVADO
Y LO HAGO PÚBLICO.
PORQUE SOY TUYA Y QUIERO HACERTE MÍA;
NO POSEERTE SINO DEDICARTE MI VIDA.
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