martes, 2 de septiembre de 2014

la guerra de las musas - vol. 2

Voy a usarte de inspiración; no hay nada que puedas hacer al respecto. Lo hice antes y lo volvería a hacer hasta que se me gasten las palabras. Porque cuando no puedo demostrártelo, aún me pasa. Y si no te puedo ver a los ojos, lo hago con mi mente. Porque no me sale decírtelo con la voz, lo vuelco en un papel para sacármelo de encima:
_ Ojalá fuéramos parte del mismo tetris. 
Podríamos divertirnos, como niñas, 
jugando todo el día. 
Encontraríamos seguramente, 
las mil y un maneras diferentes,
de acomodarnos; imagino...

Hoy te invoco, entonces, para quitarle peso a mis sueños. Porque existe lo que estoy pensando, en tu honor; y gracias a vos pasa de un plano invisible y personal, a uno más realista; más universal. Porque hoy resaltás más que nada y lo quiero registrar. Te destacás. Tu estilo personal te separa de todo lo demás, para transformarte en una nueva creación. 

_ Porque te veo en serio y encajamos.
Y ya lo sabés, y sonreís como yo,
al azar durante el día.
Combinaríamos perfectamente,
en todos los escenarios posibles
siempre triunfales; imagino...

Hay una historia que me hiciste inventar sin siquiera buscarlo, sólo con tu espíritu y tu manera de ser. Es una mezcla de romance con fantasía más aventura, pero empieza con misterio y termina con amor. No es muy larga pero es definitivamente intensa, y está llena de sensaciones poderosas; fuertes, y sólidas. Constantes desde el capítulo uno; desde el primer verso en adelante...

_ Porque unirnos sería más que lógico.
Casi obvio, en nuestro mundo,
de muchas vidas cada día.
Coordinaríamos probablemente,
en todos los momentos cambiantes,
para ayudarnos; imagino...


- Continuará -

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