Parte Cuatro
Quisiera que me mires con amor y sonrías. Que aceptes mi abrazo por lo que es cuando es tuyo. Que no me sueltes, que no me quieras dejar ir.
Quisiera llevarte a la cama y acostarme a tu lado. Que estemos quietas sólo viendo nuestros ojos. Que esa sonrisa permanezca eternamente en mi memoria.
Quisiera que prepares tus labios para recibir a los míos. Que sientas vértigo, y que entiendas a mi boca sin hablar ni una palabra. Que me permitas desparramar mil besos por todo tu ser.
Quisiera desvestirte lentamente y acariciar cada rincón de tu cuerpo. Que mis manos de artesana le demuestren a tu piel lo que significa la palabra "adorar". Que cada segundo que compartamos en esa cama sea sentido en el fondo de tu alma, y en lo más profundo de tu corazón.
Quisiera que nuestros cuerpos entonces se fusionen; y hagan uno más fuerte. Que reconozcas la diferencia entre nosotras dos, y vos y el resto del mundo. Que admitas que nunca nadie te haría sentirlo así.
Quisiera que seas valiente, como una guerrera amazona. Que aprendas a soportar los altibajos de un par. Que no te rindas antes de tiempo, sabiendo reconocer qué vale la pena.
Quisiera que sepas que el amor que necesito darte es único y eterno. Más allá de la vida y de la muerte, de la risa y del dolor. Es puro, incondicional, perpetuo, y latente...
RG
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